
Quienes Somos
"Dime de que manera ves el mundo y te diré quien eres"
Marvin Acosta.
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Nuestra cultura inconscientemente nos empuja a la crítica, el chisme y la queja; nos quejamos casi que de todo, del clima, el tráfico, nuestra pareja, los hijos, el trabajo, el jefe, la cola, el alto costo de la vida, la economía, los políticos y la lista puede llegar a ser interminable, y es que mientras más nos quejamos, más y más conseguimos razones y motivos para seguirlo haciendo, ahora, ¿es sano quejarse? La verdad, no. La queja mantiene nuestro enfoque en lo que no nos gusta, en lo que para nosotros está mal, nos frustra, nos llena de impotencia, genera estrés, aumenta los niveles de cortisol, daña nuestra salud considerablemente y no nos aporta soluciones, dicen que la queja es como el mal aliento, la notamos en los demás pero no cuando sale de nuestra propia boca, ¿te gustaría estar al lado de una persona que se queja de todo y de todos en todo momento? Estoy seguro de que no, es más me atrevo a decirte que cuando estas cerca de una persona con estas características o sencillamente te alejas de ella o le dices “hey, ¿no te das cuenta que lo único que has hecho es quejarte todo el día?” la queja nos aburre, nos hace sentir pesados y nos aleja de nuestro bienestar.
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A raíz de esto nace este maravilloso programa de formación, siguiendo la línea del Pastor Will Bowen creador del reto “Un Mundo sin Quejas” en el año 2006, el cual consiste en pasar 21 días consecutivos sin emitir quejas, criticas ni chismes, ¿sencillo? Si, ¿fácil? Para nada, ¿Cómo lo hacemos? Utilizamos una pulsera morada con la leyenda “un mundo sin quejas” o también podemos usar una liga, anillo, piedra en el bolsillo o cualquier otro accesorio que nos funcione como testigo silencioso para hacernos consciente de la queja, cada vez que nos quejamos, criticamos o caemos en el chisme cambiamos la pulsera de una mano a otra; el anillo de dedo o la piedra de bolsillo y comenzamos de nuevo inmediatamente, podemos llevar varios días sin quejarnos, pero si lo hacemos debemos comenzar de nuevo hasta lograr los 21 días consecutivos sin quejarme, mis pensamientos no cuentan para el reto, solo cuentan las palabras que pronuncio, el tiempo promedio que tarda una persona para llegar a la meta de 21 días sin quejas es de 4 a 8 meses, allí queda bien referenciada nuestra cultura hacia la queja y a sus efectos.
Nosotros agregamos a esta gran dinámica una metodología de actividades que acompañan a una persona durante este camino y así hacer más enriquecedora esta maravillosa aventura de vivir sin quejas, actividades que tienen que ver con los diferentes ámbitos de nuestra vida, desde los valores para la sana convivencia; hasta la salud, el sexo, las relaciones de pareja, el desprendimiento, los miedos, el amor propio, y mucho más, dividimos nuestra formación en tres fases de aprendizaje, cada una más completa, profunda y extensa que la anterior.
Visión
Nuestra visión es que nuestro programa de formación pueda impactar millones de personas en nuestro país y el mundo entero, llevando bienestar y calidad de vida, reconociendo que somos los responsables de nuestro bienestar y que está en nuestras manos construir el mundo que elegimos y merecemos, para nosotros y nuestras generaciones futuras.
Misión
Lograr a través de una metodología de aprendizaje sencilla, dinámica e interactiva que nuestros participantes puedan crear un punto de apoyo para los cambios que desean en sus vidas, siendo ellos mismos quienes decidan como, donde, cuando y porque usar las herramientas y en que ámbitos convirtiéndolos en los constructores y responsables de sus decisiones y elecciones.
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Te invitamos muy cordialmente a participar en nuestros grupos de aprendizaje gratuitos, si deseas formar parte de la familia Un Mundo sin Quejas dale click al siguiente botón:
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